Colombia es un país con una historia intensa y extensa. Un territorio con unas costumbres y una cultura con varios siglos de antigüedad. Una nación que pasado por varias etapas y períodos diferentes con el paso del tiempo dignos de conocer. Por ese motivo, en CurioSfera-Historia.com, te explicamos la historia de Colombia y su origen.
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Origen de Colombia
Para conocer la historia y origen de Colombia primero debes conocer cómo es. Esto es así porqué su situación geográfica ha sido fundamental a lo largo de su historia. Con la triple cadena de los Andes del Norte fragmentando el territorio, surcada por magníficos ríos, abierta al Caribe y al Pacífico, de forma estratégica situada entre las Américas del Norte y del Sur, Colombia es una tierra privilegiada que acoge una rica diversidad biológica.
El país limita al norte con el mar Caribe, al oeste con Panamá y el océano Pacífico, al sur con Ecuador y Perú, y al este con Brasil y Venezuela.
- Continente: América.
- Superficie: 1.141.748 km2.
- Capital: Bogotá.
- Población: 49.810.325 habitantes.
- Moneda: Peso colombiano.
- Lengua oficial: español.
Antiguamente denominada Nueva Granada, Colombia fue escenario de las desesperadas expediciones que realizaron cientos de curtidos conquistadores españoles en busca de El Dorado, una de las quimeras más importantes de la historia.
El Dorado nunca se encontró, pero a cambio, los conquistadores accedieron al inmenso tesoro del arte monumental, la cerámica y la orfebrería de las antiguas culturas del norte andino, e incorporaron a la corona española la más rica de las tierras de América. Sin embargo, este hermoso país no ha tenido, ni tiene, una historia fácil: su pueblo está lejos de haber obtenido la seguridad y el desarrollo que le prometieron quienes le llevaron a las libertades públicas.
Período colonial
Antes de llegar los españoles, el territorio de la actual Colombia estaba ocupado por varios pueblos en diverso grado de civilización. Los chibchas, en las mesetas orientales, eran los más importantes, con un gobierno central y conocimientos de astronomía, agricultura y alfarería.
Más atrasados estaban los caribes, que habitaban en las zonas litorales, los quechuas, los quimbayas, los chocoes y los andaquíes. Alonso de Ojeda fue quien primero arribó a sus costas (1499), de nuevo visitadas por Rodrigo de Bastidas y Juan de la Cosa (1502). En 1510 se fundó Darién, a la que siguieron Santa Marta (1525) y Cartagena (1533). En busca de las fabulosas riquezas de El Dorado partieron expediciones al interior del país. Destacaron principalmente tres:
- La de Gonzalo Jiménez de Quesada, que remontó el río Magdalena, venció a los chibchas y fundó Bogotá en el año 1538.
- La de Belalcázar, quien fundó Cali en el año 1536.
- La de Federmann, procedente de Venezuela, que conectó con ambos.
Entre los tres acordaron la pacífica distribución del territorio, al que Quesada denominó Nueva Granada, el cual se incorporó al virreinato del Perú. Para su gobierno fue creada en el 1550 una Audiencia. La Iglesia, establecida muy pronto (1534, obispado de Cartagena), contribuyó con su labor de enseñanza religiosa a consolidar el asentamiento español. Hacia 1620 se estableció en Cartagena un tribunal de la Inquisición, que contaba con un delegado en Bogotá.
La explotación de la colonia, pobre en metales preciosos, tuvo como base la agricultura. La mano de obra utilizada fue la población india, mediante el sistema de encomienda, y los esclavos negros, establecidos principalmente en la costa septentrional.
En 1717 se creó el virreinato de Nueva Granada, con capital en Bogotá, establecido definitivamente en 1740. Comprendía, además de la actual Colombia, Panamá, Ecuador y Venezuela. Durante el período virreinal se tuvo que hacer frente a ataques ingleses, holandeses y franceses, y ocurrieron también los primeros intentos de sublevación.
Independencia de Colombia
En 1781 estalló la insurrección de los comuneros o revolución de los comuneros, descontentos por el aumento de impuestos, que fue reprimida por el virrey Manuel Antonio Flores. El espíritu revolucionario francés penetró en el país al traducir Antonio Nariño Los derechos del hombre (1794).
La invasión napoleónica de la metrópoli favoreció los intentos de independencia, imposibles de frenar pese a las concesiones efectuadas por la Corona (derecho de representación en Cortes, otorgar títulos de nobleza). Las élites intelectuales y económicas se sentían a disgusto al ver que España solo se preocupaba de explotar el territorio sin preocuparse de su progreso y de sus gentes.
El 20 de julio de 1810 se celebró una junta revolucionaria y en diciembre del mismo año tuvo lugar en Bogotá el primer Congreso independiente, terminado con la división entre centralistas y federales.
La lucha entre ambos favoreció a los realistas, que desde Popayán y Santa Marta iniciaron la ofensiva, a las órdenes del general Morillo, y se adueñaron de Cartagena y Bogotá (1815). Pero poco después el ejército revolucionario, mandado por Bolívar, consiguió finalmente vencer en Boyacá (1819), Carabobo (1821) y Pichincha (1822).
La victoria de Boyacá permitió a los patriotas celebrar un congreso en Angostura (1819), que proclamó la unión de Nueva Granada y Venezuela en la República de la Gran Colombia.
Posteriormente, a nueva Granada se unieron Panamá (1821), Ecuador y Guayaquil (1822), y de la cual Simón Bolívar fue nombrado primer presidente (1821). Los congresos de 1823 y 1826, celebrados en Bogotá, dictaron normas para la organización del Estado, inspiradas por Simón Bolívar y Santander.
Fue propósito de Bolívar la unión de los estados hispanoamericanos, para lo cual convocó un Congreso continental en Panamá (1826), pero su iniciativa no tuvo éxito. Los intentos separatistas, inspirados por Santander (Colombia) y Páez (Venezuela), desembocaron en una guerra civil. En 1829 se inició la disgregación de la Gran Colombia y en 1830 Bolívar renunció a la presidencia.
Francisco de Paula Santander, presidente (1833-37) de la recién creada República de Nueva Granada, tuvo que imponer su autoridad para conseguir frenar el espíritu de rebelión. En 1841 obtuvieron el poder los moderados con Pedro Alcántara Herrán.
Su mandato (1841-45) se caracterizó por la relajación de las tensiones internas, lo que permitió atender al progreso cultural y material, continuado con su sucesor, Tomás Cipriano de Mosquera (1845-49). Se compilaron leyes (Recopilación Granadina) y se trazaron los primeros ferrocarriles.
En 1849 alcanzó el poder el liberal José Hilario López, cuyas medidas radicales (expulsión de los jesuítas, abolición de la esclavitud en 1851, sufragio universal y supresión de la pena de muerte por motivos políticos) provocaron la reacción conservadora.
El general Obando, con el apoyo de la fracción moderada del partido liberal, obtuvo en 1853 la presidencia. Continuó la obra de López al establecer el sufragio universal y la separación de Iglesia y Estado, pero fue desbancado un año después por el general Meló, que se erigió en dictador. Contra éste se sublevaron los conservadores, que consiguieron instalar en el poder a Ospina Rodríguez (1857).
El partido conservador, favorable hasta entonces a una república unitaria, se orientó hacia la solución federalista, reconocida en la Constitución de 1858 con el nombre de Confederación Granadina (rebautizada en 1863 con el de Estados Unidos de Colombia).
Mosquera ocupó el poder nuevamente durante dos períodos (1861-1864 y 1866-1867) e intentó rehacer la Gran Colombia de Bolívar, pero fracasó y acabó derrocado en 1867 por el general Santos Acosta. Comenzó entonces un nuevo período liberal en el que remitieron los desórdenes. Salgar (1870-72) reformó la enseñanza primaria, promulgó un código de comercio y fundó el Banco de Bogotá.
Durante la presidencia de Aquileo Parra (1876-78) volvieron los desórdenes civiles, que llevaron al poder a Rafael Núñez (1880), quien consiguió de España el reconocimiento de la independencia de Colombia. Núñez evolucionó hacia la derecha y gobernó en sus últimos años como si de un dictador se tratase, apoyado por la Iglesia y los latifundistas. En 1886 se promulgó una nueva Constitución, que restableció la organización unitaria de la República de Colombia.
A la muerte de Núñez (1894), los liberales se sublevaron y el país se vio envuelto en otra guerra civil (1899-1903), llamada la guerra de los Mil Días, ruinosa para su economía. En 1903, gobernando José Manuel Marroquín, Panamá se separó de la República. El movimiento secesionista fue apoyado por EE.UU., interesados en establecer su influencia en la zona del istmo.
El gobierno de Rafael Reyes (1904-09) señaló la recuperación de Colombia. Modificó la Constitución, ampliando a 10 años el mandato presidencial, y concluyó el ferrocarril de los Andes a Bogotá. Aunque su gestión dictatorial provocó el descontento en toda la nación, que se levantó contra él cuando intentó que el Congreso aprobara la independencia de Panamá. En 1910 se reformó de nuevo la Constitución y se redujo el período presidencial a cuatro años.
En 1914 Colombia reconoció la independencia de Panamá a cambio de una indemnización de 25 millones de pesos otorgada por EE.UU. Hasta 1930 se sucedieron presidentes conservadores, entre los que destacó Nel Ospina (1922-26), fundador del Banco de la República.
El país gozó en este período de una situación de estabilidad política y social y pudo iniciar el proceso de industrialización con la ayuda económica de EE.UU. El proceso se vio frenado bruscamente por la gran crisis económica de 1929.
En 1930 triunfó en las elecciones el partido liberal, con Olaya Herrera, gracias a la división de los conservadores. Sucedieron a Herrera Alfonso López Pumarejo (1934-38) v Eduardo Santos (1938-42), quien evitó la intervención del país en la II Guerra Mundial.
Conservadores y militares populistas
En 1942 fue nuevamente elegido presidente Alfonso López Pumarejo, que adoptó una política social favorable a las clases populares, lo que provocó fuertes reticencias en los sectores conservadores del país y dimitió (1945).
Fue designado para sucederle Alberto Lleras Camargo (1945-46). En el interior del partido liberal comenzó a desarrollarse una tendencia izquierdista, dirigida por Jorge E. Gaitán. En las elecciones de 1946 los liberales se presentaron divididos, lo que dio el triunfo a los conservadores; asumió la presidencia Mariano Ospina Pérez.
En 1948, mientras se estaba celebrando la IX Conferencia Panamericana de Bogotá, el asesinato de Gailán provocó una revuelta popular. Al irse extendiendo la revuelta por el país, condujo a un estado general de anarquía, y fue reprimida duramente por las fuerzas del orden. Este acontecimiento pasó a la terminología política con el nombre de bogotazo.
En las elecciones de 1950, celebradas en difíciles condiciones de estabilidad, triunfó el conservador Laureano Gómez, sin que el partido liberal interviniese en las mismas. Gómez instituyó un régimen dictatorial que reprimió con dureza a la oposición, originando una guerra civil. Muchos liberales, para huir de la represión, se vieron obligados a marchar a las montañas, donde constituyeron bandas armadas.
En junio de 1953 el presidente Urdaneta fue depuesto por un golpe militar y asumió el poder el general Gustavo Rojas Pinilla, que imitó los métodos dictatoriales de su predecesor. Apoyado por los católicos y los conservadores moderados, quiso instaurar un régimen autoritario, y en 1957 se hizo reelegir por una asamblea nombrada por él mismo.
Conservadores y liberales acordaron en el Pacto de Sitges una tregua de 12 años, según la cual se turnarían en el poder por períodos de 4 años. El ejército destituyó a Rojas Pinilla y asumió provisionalmente el gobierno de la nación. El liberal Alberto Lleras Camargo, candidato único apoyado por los dos partidos, fue elegido presidente en 1958 y formó un gabinete integrado por liberales y conservadores en igual número.
En 1962 fue sustituido por el conservador Guillermo León Valencia, y en 1966 por el liberal Carlos Lleras Restrepo. El sistema turnante establecido por el Pacto de Sitges no había conseguido recuperar la completa estabilidad para el país, sacudido por el creciente auge de la guerrilla colombiana (sobre todo a partir de 1962) y la extensión de la agitación universitaria a otros sectores sociales.
El vencedor en las elecciones de 1970, el conservador Misael Pastrana Borrero, reprimió con dureza el movimiento guerrillero y realizó una política económica desarrollista.
Historia reciente
Las elecciones presidenciales de 1974 significaron la ruptura del Pacto de Sitges y la victoria del liberal Alfonso López Michelsen. Hubo de declarar el estado de sitio (1975-76) para hacer frente a los guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias Colombianas (FARC), del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y del Movimiento 19 de Abril (M-19).
Tras otro período de Gobierno liberal (J. C. Turbay, 1978-82). el conservador Belisario Belancur (1982-86) firmó acuerdos de tregua con los tres movimientos guerrilleros más importantes, que fueron pronto incumplidos (asalto al Palacio de Justicia por parte del grupo M-19, noviembre 1985).
Los enfrentamientos se reprodujeron durante el mandato del liberal Virgilio Barco (1986-90), con atentados contra personalidades políticas, jueces y policías. Una nueva Constitución se promulgó en 1991 durante la presidencia del liberal César Gaviria (1990-94).
Su sucesor, el también liberal Ernesto Samper (1994-98), fue acusado de financiar su campaña con dinero recibido de los cárteles de la droga y hubo de proclamar por dos veces el estado de conmoción interior para combatir la violencia generalizada.
El Parlamento exculpó a Samper (junio 1996) de las acusaciones, pero la situación de debilidad del Gobierno continuó y en 1998 llevó de nuevo a los conservadores a la presidencia en la figura de Andrés Pastrana, quien entabló negociaciones con la guerrilla (enero 1999).
Colombia en el siglo XXI
En el año 2002, un endurecimiento de las posturas y el secuestro de un senador por parte de la guerrilla hicieron fracasar el diálogo iniciado por Andrés Pastrana. El candidato liberal disidente Alvaro Uribe sustituyó a Pastrana en mayo de 2002 al frente del gobierno de la República.
Álvaro Uribe y la «Doctrina de Seguridad Democrática» (2002-2010)
En mayo de 2002, Álvaro Uribe asumió la presidencia de Colombia con la promesa de abordar la creciente violencia asociada con grupos guerrilleros y paramilitares. Su gobierno implementó la «Doctrina de Seguridad Democrática», una estrategia que buscaba restaurar el orden y la seguridad mediante la consolidación del poder militar. Aunque se lograron avances en la reducción de la violencia, también hubo críticas por posibles abusos de derechos humanos.
El proceso de paz con las FARC (2012-2016)
En busca de una solución política al conflicto armado que había persistido por décadas, el gobierno de Juan Manuel Santos inició conversaciones de paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en 2012. Después de intensas negociaciones, se firmó el acuerdo de paz en 2016, poniendo fin a más de 50 años de conflicto. Aunque el acuerdo fue histórico, también generó divisiones en la sociedad colombiana.
A lo largo de este periodo, Colombia enfrentó desafíos económicos y sociales, incluyendo la desigualdad, la pobreza y la corrupción. A pesar de tener una de las economías más grandes de América Latina, la brecha entre ricos y pobres persistió, generando tensiones sociales y demandas por reformas estructurales.
Protestas y movimientos sociales
En 2019 y 2020, Colombia fue testigo de una serie de protestas y movimientos sociales que expresaron el descontento de diversos sectores de la sociedad. Las manifestaciones abordaron temas como la desigualdad, la corrupción y la falta de oportunidades, exigiendo cambios significativos en las políticas gubernamentales. La actualidad de Colombia presenta desafíos como la gestión de la post pandemia de COVID-19, la crisis económica global y la continuación de la implementación del acuerdo de paz.
El 7 de agosto de 2022 Gustavo Petro resultó elegido Presidente de Colombia. Desde entonces las políticas del país han dado un giro a la izquierda. Su gobierno afrontó una reforma tributaria para cumplir con las metas de los programas sociales, la reforma agraria, de salud y la transición energética entre otras.
Historia de la bandera de Colombia
A la pregunta de quién creó la bandera colombiana, debes conocer que la bandera colombiana fue ideada por Francisco de Miranda en 1806. E izada, por Simón Bolívar, el Libertador, frente a los españoles en la victoria de Boyacá en 1819.
Ese mismo año se proclamó la República de la Gran Colombia (que incluía también a Venezuela y Panamá); en 1822 se anexionaría Ecuador. Después de la disolución de esta confederación, ocho años más tarde, la bandera colombiana se oficializó en 1861 mediante la Constitución federal. Es muy similar por sus colores y su dibujo a las banderas ecuatoriana y venezolana. Pero se diferencia de ellas por sus proporciones y por un escudo de armas presidencial ausente (el escudo solamente figura en la bandera presidencial).
Si te preguntas qué significan los colores de la bandera colombiana, debes saber que:
- El color amarillo simboliza la justicia.
- Color azul representa la nobleza.
- Y, el color rojo es sinónimo de la bravura, del honor y de la victoria conseguida a costa de la sangre derramada en la lucha por la libertad.
Según otra interpretación, menos conocida, el color amarillo representa a América que está separada de España, en rojo, por el océano Atlántico, en azul.
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