Skip to content
CurioSfera Historia

La Armada Invencible (1588)

La Armada Invencible, la Gran Armada o la Felicísima Armada fue una expedición militar naval española en el año 1588. Preparada por el rey español Felipe II, su objetivo era invadir Inglaterra y destronar a la reina Isabel I. Este gran combate naval se situaba dentro de la guerra anglo-española de 1585-1604. Los españoles fracasaron, pero no supuso el final de la guerra, que duró 16 años más. En CurioSfera-Historia.com, te explicamos la Armada Invencible.

Ver la batalla naval de Trafalgar

Datos de la batalla de la Armada Invencible

  • Fecha: Del 31 de julio al 8 de agosto de 1588.
  • Lugar: Canal de la Mancha entre Inglaterra y Francia.
  • Combatientes: Españoles contra ingleses y holandeses.
  • Objetivo: España quería invadir Inglaterra y proteger su tráfico marítimo en el Canal de la Mancha.
  • Resultado: La Armada española resulto perdedora.
  • Personajes protagonistas: Alonso Pérez de Guzmán el Bueno, duque de Medina Sidonia. El almirante de Inglaterra Charles lord Howard de Effingham. El holandés Justín de Nassau.
  • Unidades: Fuerzas navales españolas: 20 buques de guerra (galeones), 47 buques mercantes armados, cuatro galeazas (barcos de guerra con remos auxiliares), cuatro galeras, 21 buques de transporte y 31 embarcaciones pequeñas. Desplazamiento total aproximado: 50.000 toneladas; 8.000 marineros, 2.000 remeros y 19.000 soldados. Fuerzas navales inglesas: 23 buques de guerra reales mayores y 11 menores, 192 embarcaciones privadas, de las cuales alrededor de 30 serían grandes buques. Desplazamiento total aproximado: 20.000 toneladas de buques de guerra reales y 30.000 toneladas de barcos privados; alrededor de 16.000 hombres, de los cuales 1.500 eran soldados. Fuerzas navales holandesas: más de 100 buques de guerra costeros.
  • Bajas: En el bando español unos 9.000 soldados y posiblemente 5.000 marineros y remeros muertos, hechos prisioneros o desaparecidos en naufragios; al menos 35 barcos perdidos, dos capturados por los ingleses y dos más por los holandeses. En el bando inglés, pérdidas mínimas en combate, aunque murieron varios miles de hombres debido a enfermedades y falta de provisiones. En los holandeses número desconocido de bajas.
  • Consecuencias: La campaña de la Armada no cambió la situación política y estratégica. España continuó siendo la nación europea más poderosa hasta mediados del siglo XVII

Antecedentes y contexto

El éxito en la batalla de Lepanto y los triunfos de las tropas de Flandes de Felipe II de España en 1585, impulsaron a la reina Isabel I a enviar tropas inglesas para ayudar a los holandeses. Una victoria española sobre los rebeldes holandeses habría puesto en peligro su régimen.

causas batalla Armada Invencible
Felipe II rey de España e Isabel I reina de Inglaterra

De hecho, el objetivo de la campaña de la Grande y Felicísima Armada de 1588 desplegada por Felipe consistía en derrotar a Inglaterra, la principal amenaza a su poder. Si Inglaterra era derrotada, la revuelta holandesa fracasaría y las incursiones contra las colonias y el comercio español y portugués llegarían a su fin.

Felipe creía que la mayoría de los ingleses y los holandeses seguían siendo católicos de corazón y aceptarían el nuevo régimen. Además, los éxitos en los dos países también provocarían una rápida victoria del bando católico y proespañol en la guerra civil francesa. Felipe esperaba ganar estas tres guerras con una gran ofensiva y establecer una hegemonía española en toda Europa occidental.

Preparativos y estrategias

Durante 1586 se desarrollaron dos planes para invadir Inglaterra. El duque de Parma, comandante del ejército de Felipe en los Países Bajos, sugirió que se enviasen 30.000 de sus hombres en barcazas cruzando el canal de la Mancha en un asalto sorpresa.

tácticas Armada Invencible

El marqués de Santa Cruz, comandante de la flota atlántica de Felipe, planificó el envío de 55.000 soldados desde España en una flota aumentada de forma drástica. En septiembre de 1587, Felipe convirtió estos planes en uno solo a ejecutar con los recursos disponibles: la flota atlántica pondría rumbo al Canal con parte del ejército invasor para proteger el transporte del ejército de Parma al estuario del Támesis.

El despliegue de una numerosa fuerza desde el sur al norte de Europa supuso una gran tarea administrativa, y la partida de la flota se retrasó en varias ocasiones. En febrero de 1588, Santa Cruz murió y Felipe nombró al duque de Medina Sidonia como su sucesor. El duque era un experimentado administrador y su posición social le otorgaba autoridad para mandar.

Cuando la Armada salió de Lisboa (Portugal), a finales de mayo, contaba con 29.000 hombres repartidos en 24 buques de guerra, 47 buques mercantes armados, 21 buques de transporte y 35 embarcaciones pequeñas. Los vientos contrarios y las tempestades dificultaron su avance, muy lento, y las embarcaciones pasaron un mes en La Coruña para someterse a trabajos de reparación.

El elemento sorpresa se había perdido e Inglaterra dispuso de mucho tiempo para movilizarse. Durante 1588 los ingleses pusieron en marcha 34 buques de guerra reales y 192 embarcaciones privadas con 16.000 hombres, aproximadamente. No obstante, gran parte de los barcos privados eran pequeños, muchos de ellos auxiliares. En términos de tonelaje, posiblemente la mitad de la flota inglesa eran buques de guerra construidos para la ocasión, incluidos los privados. La cifra española era de aproximadamente un tercio de la flota.

El combate

A mediados de julio, los ingleses intentaron un ataque preventivo contra la Armada en los puertos españoles, pero los vientos del sur los frenaron. Cuando los españoles surcaron el Canal, el 30 de julio, la mayor parte de la flota inglesa se encontraba en Plymouth.

fecha enfrentamiento Amada Invencible

La Armada formó a sus combatientes y buques de transporte en una media luna muy amplia, con grupos adiciónales de barcos a modo de reserva táctica. La intención era luchar en línea de frente. Probablemente, las armas pesadas se concentrarían de proa a popa, no en los costados. Los españoles sabían que eran inferiores en fuego de artillería, mientras que los ingleses eran conscientes de que debían evitar el abordaje, ya que la Armada contaba con una infantería muy superior.

El canal de la Mancha

Felipe no tenía esperanzas de que su flota, con un elevado porcentaje de buques mercantes lentos y difíciles de manejar, fuese capaz de entrar en combate con los ágiles barcos de guerra ingleses, pero tenía confianza en poder repeler un ataque del enemigo. Si la Armada alcanzaba al ejército del duque de Parma y protegía su cruce, habría logrado su propósito.

mapa Armada Invencible

La flota inglesa adoptó fácilmente la posición de barlovento. Dado que en el Canal prevalecían los vientos del oeste, tomaron una posición a popa de la formación española, a la que atacaron.

En la primera batalla, que tuvo lugar junto a Plymouth el 31 de julio, la flota inglesa se dividió en dos partes comandadas por lord Howard de Effingham y por sir Francis Drake. Los barcos atacaron de forma individual o en pequeños grupos, disparando los cañones de proa, de los costados y de la popa sucesivamente. Después, orientaron las velas hacia barlovento para recargar los cañones y dejar espacio al barco que se encontraba a popa. El ritmo de los disparos fue lento y el efecto de los mismos a larga distancia no provocó daños significativos.

Dos barcos españoles resultaron seriamente dañados, pero a causa de accidentes, y ambos fueron abandonados a manos de los ingleses (señal de que Medina Sidonia no tenía intención de entablar una batalla decisiva). Éste reorganizó la flota en una vanguardia y una retaguardia más numerosa, ambas navegando en línea de frente.

Asimismo, formó grupos de barcos de vela rápidos que pudiesen ser enviados a cualquier punto de la formación. La mañana del 2 de agosto, junto a Portland Bill, el viento otorgó a la Armada durante unas horas una posición de barlovento. Medina Sidonia intentó desencadenar una batalla de proximidad, pero los ingleses la evitaron. El fuego a larga distancia continuó hasta última hora de la tarde, pero apenas sin efectos en ambos bandos.

La isla de Wight

Al día siguiente, la flota inglesa se dividió en cuatro escuadrones, aparentemente para disfrutar de mayor control. El 4 de agosto, la Armada pasó junto a la isla de Wight y se desencadenó una nueva batalla. Es posible que el duque hubiese dejado algunos barcos a modo de anzuelo para obligar a los ingleses a luchar.

Incluso pudo haber intentado utilizar el canal de Solent como puerto protegido. Si ésas eran sus intenciones, falló en ambas. De nuevo, los daños fueron limitados, pero a esas alturas los dos bandos carecían de munición y se abstuvieron de seguir combatiendo.

El paso de Calais

La Armada echó anclas junto a Calais la tarde del 7 de agosto. La flota principal inglesa se había reforzado con el escuadrón que vigilaba el estrecho. La primera fase de la operación española tuvo éxito, pero la geografía y las complejidades de una combinación combinada provocaron el desastre.

Desde 1574, los rebeldes holandeses controlaban los puertos de aguas profundas de sus costas. En aquel momento bloqueaban los puertos de Flandes, evitando que las embarcaciones del duque de Parma llegasen a mar abierto. Además, el mar al que daban estos puertos era poco profundo y no permitía navegar a los barcos de la Armada lo suficientemente cerca como para romper el bloqueo.

Sin una base de aguas profundas para la Armada, la invasión del duque de Parma tendría que llevarse a cabo inmediatamente, antes de que se terminasen las provisiones de los españoles. Sin embargo, sin el control de las aguas poco profundas, la flota de Parma ni siquiera podía zarpar (un problema que tendría que haber sido resuelto en la fase de planificación). Parma y Medina Sidonia habían creído durante mucho tiempo que el otro tenía la solución, mientras Felipe había subestimado la disposición de los holandeses para luchar.

Durante la noche del 7 de agosto, los ingleses enviaron ocho brulotes para desviar a la Armada. Los barcos españoles cortaron las cuerdas de las anclas y huyeron, pero la formación perdió la cohesión.

Gravelines

El 8 de agosto, en la batalla que tuvo lugar junto a Gravelines (norte de Francia), la flota inglesa atacó con agresividad y de cerca, y el efecto de su artillería aumentó considerablemente. Medina Sidonia reorganizó su flota poco a poco, pero se perdieron cuatro barcos y varios más resultaron dañados.

historia de la Felicísima Armada Invencible 1588

A primera hora del 9 de agosto, parecía que la Armada iba a encallar en los bancos de arena junto a Flandes, pero se salvó gracias a un cambio de viento. Los españoles no lo sabían, pero si el ejército del duque de Parma hubiese conseguido pasar los bancos de arena, la desgastada pero no vencida Armada podría haber protegido su paso. La flota inglesa ya había gastado su munición y no podría volver a luchar durante varias semanas. Sin un puerto donde atracar, la Armada no tenía más opción que regresar a España.

El mar del Norte

Con los vientos dominantes y una flota inglesa aparentemente superior, los españoles consideraron que lo mejor era rodear las islas británicas. La flota se desperdigó gradualmente debido a las tormentas, y un total de 28 barcos se hundieron en el mar o en las costas escocesas e irlandesas mientras buscaban refugio para realizar reparaciones y buscar agua.

El regreso a España

Los primeros barcos llegaron a España el 21 de septiembre, aunque los rezagados siguieron llegando durante un mes. Probablemente, alrededor de la mitad de los hombres que habían partido de España no regresaron, debido principalmente a los naufragios y a las enfermedades Los vencedores no salieron mucho mejor parados, ya que las enfermedades contagiosas y las bajas logísticas provocaron la muerte de miles de hombres.

Consecuencias y repercusiones

La campaña de la Armada no tuvo grandes repercusiones ya que no cambió la situación política y estratégica. El intento de Felipe de ganar todas las guerras con una ofensiva fracasó, y los ingleses continuaron teniendo el control del Canal y la libertad de atacar el comercio español.

La culminación de Inglaterra como potencia marítima y naval llegó más tarde, después de un largo período de supremacía marítima holandesa, Felipe desvió el ejército de Parma a la guerra civil en Francia. Los holandeses ganaron mucho territorio y tiempo para desarrollar su ejército y su armada, mientras los franceses tomaron partido por su nuevo rey, Enrique IV, contra la intervención española. No obstante, España continuó siendo la nación europea más poderosa hasta mediados del siglo XVII.

Historia de otras batallas

Batalla naval de Diu Batalla de Maratón Batalla de Sadowa Batalla de Kahlenberg Batalla del Atlántico

¿Quieres conocer más historia militar o batallas?

Desde CurioSfera-Historia.com, esperamos que esta reseña histórica titulada La Armada Invencible, te haya sido de utilidad. Si quieres acceder a más artículos históricos, visita la categoría elementos militares o historia. Y si te ha gustado, puedes dejarnos un comentario.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *