Este alimento lo consumimos a menudo y de muchas formas, pero, ¿conoces cuál es el origen del huevo? En CurioSfera-Historia.com, te explicamos la historia del huevo, cómo se inició su consumo, la relación y simbología en las diferentes civilizaciones, y muchas curiosidades más.
Origen del huevo
Respecto a los orígenes del huevo, debes saber que tanto los antiguos egipcios y griegos vieron en el huevo la representación de los cuatro elementos que formaban el universo:
- El fuego: la yema.
- El agua: la clara.
- La tierra: la cáscara.
- El aire: el espacio vacío del extremo superior.
Los egipcios incluían un huevo en el ajuar funerario, para asegurarse una vida futura. Los griegos, colocaban huevos sobre sus tumbas. No sorprende que entre los romanos anduviera el dicho: Omne vibum ex ovo = todo lo vivo procede del huevo.
También los íberos colocaban huevos sobre las tumbas. Restos de aquellos cascarones gigantes, acaso de avestruz, se conservan. Es tradición relacionar el huevo con la eternidad, simbolizan con él el origen de las cosas. Con la frase latina Ab ovo usque ad malum = del huevo a la manzana, se expresaba que algo se lleva a cabo de principio a fin, de la /a/ a la /z/. Esta expresión alude a la costumbre gastronómica antigua de comenzar las comidas con un huevo y terminarla con una manzana.
Muchos héroes de la mitología china nacieron de un huevo fecundado por el sol; y en la grecolatina los Dióscuros Cástor y Pollux, hijos de Zeus surgieron de un huevo puesto por Leda transformada en cisne. El interés suscitado por este alimento primordial, se hace sentir en diversos aspectos de la vida. Entre los museos del mundo se encuentra el Museo de Huevos de Pascua Pintados de Budapest, más de veinte mil huevos procedentes de todas las comarcas húngaras con sus dibujos propios pueden observarse allí.
Para conservarlos deben ser cocidos previamente en ceniza de modo que se deseque la parte interior y quede sólo la cáscara; hay ejemplares centenarios que se conservan como si hubieran sido puestos en el día.
Historia del huevo en las creencias populares
Son numerosas las creencias populares antiguas en torno al huevo en todos los países del mundo. Solo a modo de ejemplo:
- Se dice que comer el primer huevo puesto por una gallina negra alarga la vida.
- En el campo andaluz se creía antaño que colgar un huevo del techo el día de la Ascensión preserva la casa de rayos, incendio y calamidad.
- En ese mismo plano religioso se cree que los huevos puestos estando expuesto el Santísimo en una iglesia cercana preservan de morir ahogado o atragantado.
Su vinculación religiosa tiene que ver con su simbolismo. Siglos atrás se prefiguró la Santísima Trinidad con el huevo por estar formado de tres elementos en un solo objeto: cáscara, clara y yema, sirviendo así para explicar el misterio.
- En su primera salida a la calle, el bebé recibe como regalo un huevo para que la Trinidad lo proteja.
- En el campo se dice que quien come en la mañana de Pascua un huevo puesto en Viernes Santo no tendrá problemas el resto del año, y su cosecha será espléndida.
- La costumbre de regalar huevos de Pascua estriba en esto y en la creencia de que el huevo simboliza el nacimiento y la resurrección.
- Asimismo se tiene por mala cosa introducir huevos en casa tras la puesta de sol. Es sinónimo de mala suerte en el futuro.
Egipcios y griegos lo consideraban símbolo de renovación y de vida, razón por la cual ya era en la Antigüedad objeto de regalo, y se tenía al huevo por elemento de suerte, que se agrandaba si éste contenía dos yemas.
También la magia tuvo que ver con el huevo. Fue antaño muy frecuente romper la cáscara tras comer un huevo duro o pasado por agua: se evitaba que sus restos se utilizaran en encantamientos y maleficios: el naturalista latino Plinio, aconseja en su Historia natural hacerlo para evitar problemas.
La adivinación por el huevo es práctica extendida. Es simpática la noticia referida al ámbito rural de Cataluña, donde se pensaba antaño que si una muchacha rompe un huevo la noche de San Juan y con el dedo remueve la clara verá en el fondo del vaso el rostro de quien será su marido.
Para aclarar la vista se pasaba por el ojo afectado un huevo de gallina recién puesto. El agrónomo español de finales del XV Gabriel Alonso de Herrera, dice en su Obra de agricultura: “La clara quita el ardor de ojos, aclara el rostro y quita las quemaciones del sol, y con ella hacen alcohol que quita las legañas, y cocida la clara en vinagre es buena contra las cámaras (diarreas). Aprovecha para curar heridas recientes, y crudos aclaran la voz. Si los echan a cocer en vinagre recio gástaseles la cáscara y pueden meterlos por cualquier cabo angosto”.
Historia del huevo en la religión
El huevo tuvo que ver mucho con cuestiones teológicas, por sorprendente que pueda parecer. El huevo fue objeto de prohibición en Cuaresma. La Pascua de Resurrección suponía el fin de todo ayuno; atrás quedaba la Cuaresma con sus limitaciones gastronómicas, entre las que se contó en la Edad Media también el huevo. Hubo una polémica en torno a si el huevo era producto cárnico, ya que de él sale el pollo.
Estuvo a punto de ser prohibido como alimento para época de ayuno, pero su consumo estaba tan arraigado que santo Tomás de Aquino, máximo teólogo medieval y defensor de la tortilla, dictaminó que el huevo no rompía el ayuno porque no llena el estómago.
Sin embargo los espíritus escrupulosos no lo consumían esos días. Este curioso asunto dejó su huella en el folclore pascual: el Viernes Santo se presentaba al sacerdote para su bendición una cesta de huevos duros que eran comidos el domingo de Resurrección como muestra del fin del ayuno.
En el ámbito rural se dice que quien come en la mañana de Pascua un huevo puesto en Viernes Santo no tendrá problemas el resto del año, y su cosecha será espléndida: la costumbre de regalar huevos de Pascua estriba en esto.
En el mundo bíblico se juraba llevando el hombre su mano derecha a esa parte del cuerpo. Al principio del capítulo 24 del Génesis, se lee: “Viéndose Abraham ya viejo, y que el Señor le había bendecido en todas las cosas, dijo al criado más antiguo de su casa y mayordomo de cuanto tenía: pon tu mano debajo del muslo, porque quiero tomarte juramento”.
Historia del huevo bajo en colesterol
El norteamericano Pau May «inventó» los huevos con bajo contenido en colesterol en el año 1988. May era director de la granja avícola Resemary en Santa María (California). Descubrió que modificando la alimentación de las gallinas destinadas a la cría consiguió obtener huevos con un índice de colesterol medio de 125 mg, en lugar de 280. Estas cifras fueron confirmadas por el departamento de Alimentación y Agricultura del estado de California.
Historia del huevo duro en barra
En el año 1987, el Sr. Ofdor inventó el huevo duro en barra. Las yemas y las claras crudas se cuecen por separado antes de ser aglutinadas nuevamente, formando una barra, reconstituida de 300 gramos equivalente a 50 huevos duros.
Historia del huevo de Colón
Digamos para terminar que el famoso huevo de Colón no fue idea del almirante, ni fue él quien tuviera la ocurrencia de ponerlo de pie ante la Junta de Sabios de la Universidad de Salamanca.
El protagonista de la idea fue Filippo Brunelleschi, a quien antes de iniciar la cúpula de la catedral de Florencia en 1420, le preguntaron: “¿Cómo solucionarás el problema de construir cúpula tan grande?”, y contestó: “Igual que se sostiene un huevo de pie”; y cogiendo uno que llevaba lo abolló por la parte donde el huevo tiene su pequeña cámara de aire, y quedó de pie.
En el siguiente audio, tienes más datos acerca del huevo de Colón:
Otros inventos relacionados con los alimentos
Origen de los huevos de Pascua Origen de la mermelada Origen del pan Origen de la berenjena
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Fuentes y bibliografía
– FERNÁNDEZ-ARMESTO, F. (2004). Historia de la comida: alimentos, cocina y civilización. Barcelona. Tusquets Editores.
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– LAUDAN, R. (2005). Cuisine and Empire: Cooking in World History (en inglés). Los Ángeles. University of California Press.
– PÉREZ, M.A. (2019). Comer y beber: Una historia de la alimentación en España. Madrid. Editorial Cátedra.
– ROLDÁN. J.A. (2014). Alimentación y desarrollo Humano a través de la Historia: Importancia histórica de los alimentos en la evolución humana. Madrid. Editorial Académica Española.
– TANNAHILL, R. (1973). Food in History (en inglés). Nueva York. SteinandDay.
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– WEISS, M. (2008). Food in Medievals Times (en inglés). Connecticut. Greenwood Publishing Group.
– AUTOR: CURIOSFERA-HISTORIA.COM
– FECHA DE PUBLICACIÓN: ABRIL DE 2020